viernes, 3 de abril de 2009

Nuevas formas de comunicación


Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, de experiencias colmado,
no temas a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni al colérico Posidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Posidón encontrarás,
si no lo llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante tí.

(C. Cavafis, Ítaca)


Catetos somos. Y para redimirnos de nuestra catetez emprendimos un viaje iniciático, a fin de empaparnos hasta la médula de las obras maestras de la pintura. Y, catetos como somos, nos alojamos en modestos (pero limpios) hostales, con habitaciones dotadas de teléfonos color amarillo canario. En nuestra ignorancia, desconocíamos que cuando se produjera el acercamiento a lo sublime, al arte eterno, nuestra percepción estría ya fatalmente viciada por la cutrez de la decoración del hostal.

O quizás lo que ocurrió fue que nuestro pensamiento no era lo suficientemente elevado, ni selecta la emoción que tocaba nuestro espíritu, como exigía Cavafis al navegante que se encaminara hacia su Ítaca. Es posible que la cutrez ya estuviera dentro de nuestra alma.

Pero también puede que la explicación sea otra muy distinta. ¿Será que nuestro surrealismo nos hace ver en el lienzo una metáfora del poder de la comunicación? ¿No habría entregado hoy Justino de Nassau a Ambrosio de Spinola un icono telemático antes que las llaves de la ciudad? ¿Acaso el Presidente Obama no acaba de ofrecer como presente a la Reina de Inglaterra nada menos que un iPod?

Catetos, pero surrealistas. Surrealistas, pero catetos.

Publicado por Sensible y Cateta y Odiseo

2 comentarios:

Mario ISO101 dijo...

Divertido montaje!

~Mar~ dijo...

Muchas gracias por pasarte Odiseo.
Me ha gustado lo que he leido, que, aunque breve, he de decir que me ha hecho sonreir con la acertada visión que tienes acerca de la realidad.
Me agradaría mucho seguir leyendo, a ver si vuelve esa maravillosa inspiración ;). Nos leemos, un beso.